El Estádio Municipal de Braga, conocido popularmente como “A Pedreira” debido a su ubicación en una antigua cantera, es una obra maestra de la arquitectura deportiva situada en Braga, Portugal. Inaugurado en 2003, fue diseñado por el renombrado arquitecto portugués Eduardo Souto de Moura, quien recibió el Premio Pritzker en parte por esta innovadora creación. 

Este estadio destaca por su diseño único: en lugar de las tradicionales cuatro gradas que rodean el campo, cuenta con dos tribunas laterales paralelas, mientras que los fondos están abiertos, ofreciendo una vista impresionante de las paredes de roca de la cantera en un lado y panorámicas de la ciudad en el otro. Las tribunas están cubiertas por una estructura de techo suspendida, inspirada en los antiguos puentes incas, que se sostiene mediante cables de acero, creando una estética ligera y elegante. 

Con una capacidad para 30.286 espectadores, el estadio es el hogar del Sporting Clube de Braga y ha sido escenario de eventos de gran relevancia, incluyendo partidos de la Eurocopa 2004. Durante este torneo, albergó dos encuentros de la fase de grupos: Bulgaria vs. Dinamarca y Países Bajos vs. Letonia. 

Debido a su integración armoniosa en el paisaje y su diseño vanguardista, el Estádio Municipal de Braga ha sido objeto de admiración a nivel internacional, siendo considerado una de las estructuras deportivas más emblemáticas del mundo.