Silvio Trucco

Silvio Aníbal Trucco, nacido el 18 de abril de 1978 en Rafaela, Santa Fe, es un árbitro argentino con una destacada trayectoria en el fútbol nacional. Debutó en la Primera División de Argentina en 2011, dirigiendo el partido entre Newell’s Old Boys y Godoy Cruz, que finalizó con una victoria 3-1 para el equipo mendocino. 

Proveniente de una familia con una sólida tradición arbitral, Silvio es hijo de Luis Trucco, exárbitro y asistente internacional FIFA. Sus hermanos, Gisela y Ángelo, también se dedican al arbitraje, siendo Gisela la primera mujer en desempeñarse como asistente en un partido de la Primera División argentina en 2017. 

Entre 2013 y 2019, Trucco fue árbitro internacional, representando a Argentina en diversas competiciones. Además de su labor en el campo, ha desempeñado funciones como árbitro asistente de video (VAR) en partidos de relevancia, incluyendo Superclásicos entre River Plate y Boca Juniors. 

A lo largo de su carrera, ha estado involucrado en situaciones controvertidas. Una de las más recordadas ocurrió en 2014, durante un Superclásico por la Copa Sudamericana, donde su actuación fue objeto de críticas debido a la cantidad de infracciones y amonestaciones.